Dopaje y Ciencias del Deporte: ¿línea de investigación emergente o consolidada?

Resumen

La necesidad de abordar un tema tan complejo como el dopaje desde el ámbito académico viene dada por una preocupación cada vez más generalizada, no sólo del mundo deportivo, sino también de una parte importante de la sociedad. Entender cuáles son los elementos clave de análisis de este controvertido fenómeno es objeto de cada vez mayor producción científica en los últimos años. Si bien modalidades deportivas como el ciclismo o el atletismo se han visto masivamente representadas a través de casos mediáticos, otros deportes o actividades físico-deportivas más minoritarias también han sido objeto de investigación.

La problemática del dopaje se ha visto como un mal endémico al propio modelo deportivo, es decir, una “contradicción interna de la institución deportiva” (Escriva, 2001, p. 129). Para autores como Dimeo (2007), el origen del dopaje está en el origen mismo del deporte, a mediados y finales del s. XIX. Es el modelo deportivo actual, tal y como lo entendemos ahora, con reglas universales de juego, tiempos y espacios regulados, y organismos internacionales que lo gestionan: es el deporte consagrado al récord y al rendimiento (Elias y Dunning, 1992; Guttman, 1978). No será hasta los Juegos Olímpicos de Méjico 1968 cuando el COI lleve a cabo por primera vez controles basados una primera lista de sustancias prohibidas. Su utilización en pruebas deportivas se consideró inmoral, perversa e indecente, y cambió la cara del deporte moderno al arrojar la sombra de la sospecha sobre los atletas. La respuesta institucional de los poderes públicos no tardó en llegar. Además del COI, se considera al Consejo de Europa como institución precursora de la política contra el dopaje que llevó a crear en 1999 la que es hoy considerada como el referente a nivel internacional: la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).

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